sábado, 3 de julio de 2010

¿La Bíblia fue Escrita o Inpirada por Dios? (parte 2)

Despues de la Expulsión de Adan y Eva, los dos primeros seres humanos creados por dios sobre la tierra, procrearon a Caín y Abel. Por celos, como lo asevera la Biblia, Caín asesinó a Abel y por esa razón dios (el señor), maldijo a Caín (como siempre el dios bíblico maldice una vez más). A mi por lo menos me enseñaron, y lo creo, que maldecir es malo. Bueno volviendo al punto, en el cap 4, Ver 14, Caín acepta su culpa ¨He aquí que hoy tu me arrojas de esta tierra, y yo iré a esconderme de tu presencia, y andaré errante y fugitivo por el mundo: por tanto, cualquiera que me hallare me matará.¨. dios le contesta en el próximo versículo (15) ¨Díjole el Señor: no será así: cualquiera que matare a Caín, recibirá un castigo siete veces mayor, y puso el Señor en Caín una señal para que ninguno que le encontrase le matara.¨. ¿Si Caín y Abel, después de Adan y Eva eran los únicos habitantes de la Tierra, a quién le temía Caín, y el mismo Señor, que hasta se vió en la necesidad de marcarlo?. ¿O existían ya en la tierra otros habitantes?. Por la decisión del Señor, de marcar a Caín para que no lo mataran, deduzco que había alguien más habitando la Tierra para ese momento.

Por cierto, antes de pasar a otro punto, me llama mucho la atención que a dios se le llama Señor al principio de la Bíblia y luego miles de años despues se cambió el nombre a Jehovah. Aunque parezca que escribo todo con ironía, no es así, sólo quiero ir llamando la atención sobre los detalles que me llevaron al título de estos artículos. Ahora, regresando a la historia, Caín conoció a una mujer y engendró toda una generación. al leer esto en la Bíblia, puedo libremente concluir, por lógica, que entre esos otros habitantes (a los cuales temía Caín, y el propio señor) había mujeres entre ellos, y debieron ser bonitas puesto que Caín se enamoró ¿Quién Crearía a esos otros habitantes?.

Siempre se nos ha dicho que todos somos hijos de dios, y por eso me llama mucho la atención el Ver 2, del cap 6 del Génesis. ¨Viendo los hijos de Dios la hermosura de las hijas de los hombres, tomaron de entre todas ellas por mujeres las que más le agradaron¨. Quiere decir entonces que los hijos de dios son de dios y los hijos de nosotros (los hombres) son otra cosa. Es decir nosotros no somos los hijos del dios Bíblico.

En el Versículo siguiente, es decir el 3, los más tontos, los hombres pagamos los platos rotos por la conducta de los hijos del dios Bíblico (de ahora en adelante cada vez que me refiera a dios, será el dios bíblico, es decir el dios al cual hace referencia la bíblia). Ver 3. ¨Dijo entonces dios: no permanecerá mi espíritu en el hombre para siempre, porque es muy carnal y sus días serán ciento veinte años.¨. Supongo que en la bíblia, dios o a quienes el inspiró se les olvidó mencionar el motivo por el cual el hombre fue el único castigado por ser carnal, cuando fueron los hijos de dios los que tomaron la iniciativa de tener relaciones carnales con las hijas de los hombres, ¡ah! y de paso, nos restó tiempo de vida condenandonos a vivir ciento veinte años. Supongo que nos ha seguido castigando porque ahora de bromita vivimos un promedio de 70 años, con la excepción de aquellos pocos que viven cien o un poquito más, y debe ser porque esos viejitos o viejitas longevos nunca llegaron a juntarse con los hijos de dios.

De esa union de los hijos de dios y las hijas de los hombres, nacieron, hijos, es decir los nietos de dios; y sin embargo, para mi sorpresa, los mandó a liquidar con el diluvio, digo yo, porque a los únicos que ordena se salven en el Arca, fueron Noé, su mujer, sus hijos y sus mujeres; Los demás se fregaron. Bueno, no todos se fregaron, también metió en el Arca una pareja por cada especie de animales que se movian sobre la tierra. Muy chevere, dios prefirió los animales a sus propios nietos.

Todo un acontecimiento despues del diluvio, pero no quiero detenerme allí, ya habrá tiempo para regresar a esa parte; ahora pasemos al Cap 11, Cuando en la tierra se hablaba un sólo idioma. En ese entonces se reunieron varias pueblos y decidieron edificar una ciudad y una torre (Babel), cuya cumbre llegue al cielo y hacer célebre su nombre antes de esparcirse por toda la faz de la tierra. Esta decisión de esos pueblos, enfureció a dios, supongo que el consideraba un pecado construir una ciudad y una torre. El castigo, para nosotros sus hijos, es decir nuestros ancestros, fue confundir las lenguas para que no se entendieran entre ellos y de paso, como si no fuera poco el castigo, los esparció por la faz de la tierra.

A veces reflexiono ¡y si todos los pueblos del mundo hablasen el mismo idioma, no sería todo un poco más fácil!. Con mucha frecuencia cuando hago una que otra indagación en la Internet, encuentro que la información está en un idioma del cual no tengo la más remota idea, apenas entiendo precariamente mi idioma natal (Español) y un poco el Inglés. Se imaginan lo difícil que será aprender todos los idiomas del mundo. ¿Pensaría dios en esa pequeña cosa, cuando confundió nuestras lenguas?.

Al respecto de este Capítulo, quiero resaltar, que aquí, nuevamente, dios implica a su familia en la decisión. Ver 7. ¨Pues, descendamos, y confundamos allí mismo su lengua, de manera que uno no entienda el habla del otro¨. ¿Con quién descendió dios y le pidió ayuda para confundir las lenguas de nosostros? ¿Sus hermanos, hijos, amigos, coterraneos????. Al fin y al cabo nos desunió para siempre, aunque los religiosos dicen lo contrario, que dios une a los hombres. Es confuso, pero así está escrito y lo escrito, escrito está.

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