miércoles, 18 de agosto de 2010

¿Defendía Jehovah la Pureza de la Raza Hebrea?

Aunque en el antiguo testamento existen infinidad de pruebas documentales de que Jehovah no es el Dios Universal creador de toda la especie humana, creo, hasta el momento, haber tomado una pequeña muestra del génesis para presentarle al lector evidencias contundentes de lo afirmado y haberle despertado la curiosidad para que continúen indagando al respecto.

Cumplido ese propósito me dispongo a continuar hurgando en nuestro origen, todavía enfatizando mis observaciones en el libro del Génesis Bíblico. Los primeros humanos, reportados por la Biblia fueron descendientes de los dioses a través de procedimientos, que supongo, fueron aplicaciones sofisticadas de la ingeniería genética, esto para mí no tiene mucha discusión, si nos atenemos a lo divulgado por la ciencia oficial, y nos imaginamos lo que no se hace del conocimiento de nosotros, el vulgo.

Hasta la revisión que he hecho de la Biblia, puedo resaltar dos hechos visibles, en primer lugar; los primeros hombres creados por el dios bíblico fueron personas longevas que vivieron en promedio unos novecientos (900) años; en segundo lugar, que los hijos resultantes de las uniones de los hijos de dios con las hijas de los hombres, fueron seres gigantes.

Esto de los gigantes está claramente resaltado en el cap. 6, versículo 4 del libro de Génesis. ¨Es de notar que en aquel tiempo había gigantes sobre la tierra: porque después que los hijos de Dios se juntaron con las hijas de los hombres, y ellas concibieron, salieron a luz estos valientes del tiempo antiguo, jayanes de nombradía¨ según el diccionario de la Real Academia Española, Jayán, Significa Persona de gran estatura, robusta y de mucha fuerza. Así que no queda ninguna duda de que eran realmente gigantes propiamente dicho a los que se refirieron los escritores del Antiguo Testamento.

Si tuviésemos que concluir en este instante, sin más información sobre la materia, dos hechos son resaltantes: Los dioses, padres de estos terrícolas, pertenecían ó pertenecen a una raza cósmica cuyo período de vida era o es muy largo; y en segundo lugar que eran o son de una considerable estatura. Respecto a esto último, se hace referencia de ello en una buena cantidad de libros antiguos y considerados sagrados en otras culturas, como se considera la Biblia para la cultura occidental. Sin embargo, como estamos centrados en el génesis bíblico, dejaremos esas referencias para futuras publicaciones.

Además de las dos conclusiones que acabamos de mencionar, también nos asaltan dos preguntas que nos pueden o deben llevarnos a profundas reflexiones. ¿Porqué la humanidad ya no es tan longeva? Y ¿Porqué actualmente no existen gigantes sobre la tierra?. La respuesta a la primera pregunta la abordamos en el escrito anterior, aunque de una forma que demostraba el propósito de los títulos de los escritos anteriores (que el dios bíblico no es dios universal y que si pudo haber sido él quien inspiró el Antiguo Testamento).

Sin embargo, vale la pena tratar de ampliar la respuesta a estas dos preguntas a la luz de lo que el mismo antiguo testamento revela; sin embargo, vale la pena desviarnos un poquito para complementar el versículo 4 que he citado. Este desvío lo vamos a realizar a través de algunas líneas del libro apócrifo de Enoc, también conocido como Henoc. Recordemos, que Enoc desciende de la estirpe de Seth, el hijo que engendró Adán, después de la muerte de Abel, de Enoc, descendieron: Matusalén, Lamec y Noé (el héroe del Diluvio Bíblico). Por si algún lector no conoce lo que son los libros apócrifos vamos a definirlo de manera sucinta. Son Libros religiosos no reconocidos como sagrados por la Iglesia. Hay apócrifos del Antiguo y del Nuevo Testamento. Entre los primeros están, entre otros, la Historia de Susana, Tobías y Judit, Baruc y Sabiduría (de Salomón). Los más conocidos de los Apócrifos del Nuevo Testamento son el Protoevangelio de Santiago, Evangelio de Nicodemo, Hechos de Pablo, la Venganza del Salvador y la Correspondencia entre Jesús y Abgaro, pero también hay libros apócrifos muy interesantes como este de Enoc, el libro 4 de Esdrás y otros a los cuales los religiosos les tienen pavor de mencionarlos; la mayoría de estos libros se consiguieron en las cuevas de Qumrán en el año de 1947. A estos libros se les conoció al principio, y aún ahora, como los rollos del mar muerto o rollos de Qumrán, por hallarse los primeros rollos en una gruta situada en Qumrán, a orillas del mar muerto.

El Libro de Enoc ha sido traducido al castellano desde dos versiones inglesas, editadas por Robert H. Charles y Hedley F. Sparks, y desde la versión francesa de François Martin; las tres a su vez traducidas de los manuscritos etíopes, cotejados con manuscritos griegos; corregidas además estas versiones de acuerdo con los manuscritos arameos de Qumrân (4QEn - 4QEnastr), editados por Josef T. Milik, traducidos al castellano por Florentino García M.

Del Libro de Enoc vamos a presentarles la parte más resaltante que compete al tema que tratamos, y puede resultar algo tedioso leerlo, pero le pedimos que lo lea porque es muy significativo su contenido.

Capítulo 6
1 Así sucedió, que cuando en aquellos días se multiplicaron los hijos de los hombres, les nacieron hijas hermosas y bonitas;

2 y los Vigilantes, hijos del cielo las vieron y las desearon, y se dijeron unos a otros: "Vayamos y escojamos mujeres de entre las hijas de los hombres y engendremos hijos".
(Gn 6:1-4)

3 Entonces Shemihaza que era su jefe, les dijo: "Temo que no queráis cumplir con esta acción y sea yo el único responsable de un gran pecado".


4 Pero ellos le respondieron: "Hagamos todos un juramento y comprometámonos todos bajo un anatema a no retroceder en este proyecto hasta ejecutarlo realmente".

5 Entonces todos juraron unidos y se comprometieron al respecto los unos con los otros, bajo anatema.


6 Y eran en total doscientos los que descendieron sobre la cima del monte que llamaron "Hermon", porque sobre él habían jurado y se habían comprometido mutuamente bajo anatema. Nota Nuestra (estos son a quienes se les conoce como los ángeles caídos)

7 Estos son los nombres de sus jefes: Shemihaza, quien era el principal y en orden con relación a él, Ar'taqof, Rama'el, Kokab'el, -'el, Ra'ma'el, Dani'el, Zeq'el, Baraq'el, 'Asa'el, Harmoni, Matra'el, 'Anan'el, Sato'el, Shamsi'el, Sahari'el, Tumi'el, Turi'el, Yomi'el, y Yehadi'el.

8 Estos son los jefes de decena.


Capítulo 7

1 Todos y sus jefes tomaron para sí mujeres y cada uno escogió entre todas y comenzaron a entrar en ellas y a contaminarse con ellas, a enseñarles la brujería, la magia y el corte de raíces y a enseñarles sobre las plantas.

2 Quedaron embarazadas de ellos y parieron gigantes de unos tres mil codos de altura que nacieron sobre la tierra y conforme a su niñez crecieron;

3 y devoraban el trabajo de todos los hijos de los hombres hasta que los humanos ya no lograban abastecerles.

4 Entonces, los gigantes se volvieron contra los humanos para matarlos y devorarlos;
(Sal 14:4; Mi 3:3)

5 y empezaron a pecar contra todos los pájaros del cielo y contra todas las bestias de la tierra, contra los reptiles y contra los peces del mar y se devoraban los unos la carne de los otros y bebían sangre.
(Jr 12:4)

6 Entonces la tierra acusó a los impíos por todo lo que se había hecho en ella.
(Gn 6:5-11,13; Ap 12:16)


Capítulo 8

1 Y 'Asa'el enseñó a los hombres a fabricar espadas de hierro y corazas de cobre y les mostró cómo se extrae y se trabaja el oro hasta dejarlo listo y en lo que respecta a la plata a repujarla para brazaletes y otros adornos. A las mujeres les enseñó sobre el antimonio, el maquillaje de los ojos, las piedras preciosas y las tinturas

2 Y entonces creció la mucho impiedad y ellos tomaron los caminos equivocados y llegaron a corromperse en todas las formas.

3 Shemihaza enseñó encantamientos y a cortar raíces ; Hermoni a romper hechizos , brujería, magia y habilidades afines; Baraq'el los signos de los rayos; Kokab'el los presagios de las estrellas; Zeq'el los de los relámpagos; -'el enseñó los significados; Ar'taqof enseñó las señales de la tierra; Shamsi'el los presagios del sol; y Sahari'el los de la luna, y todos comenzaron a revelar secretos a sus esposas.

4 Como parte de los hombres estaban siendo aniquilados, su grito subía hasta el cielo.
(Ex 3:7-9)


Capítulo 9

1 Entonces Miguel, Sariel, Rafael y Gabriel observaron la tierra desde el santuario de los cielos y vieron mucha sangre derramada sobre la tierra y estaba toda llena de la injusticia y de la violencia que se cometía sobre ella.

2 Considerando esto, los cuatro fueron y se dijeron: "el grito y el lamento por la destrucción de los hijos de la tierra sube hasta las puertas del cielo".

3 Y dijeron a los santos del cielo: "Es ahora a vosotros a quienes las almas de los hijos de los hombres suplican diciendo 'llevad nuestra causa ante el Altísimo, nuestra destrucción ante la gloria majestuosa y ante el Señor de todos los señores' en cuanto a majestad".

4 Y Rafael, Miguel, Sariel y Gabriel dijeron al Señor del mundo: "Tú eres nuestro gran Señor, el Señor del mundo, el Dios de dioses, el Señor de señores y el Rey de reyes; los cielos son el trono de tu gloria por todas las generaciones que existen desde siempre; toda la tierra es el escabel ante ti para siempre, y tu nombre es grande, santo y bendito por toda la eternidad.

5 "Eres tú quien todo lo ha creado y en ti reside el poder sobre todas las cosas; todo es descubierto en toda su desnudez ante ti; tú lo ves todo y nada se te puede esconder.
(1Cr 29:10-12, Hb4:13)

6 "Tú has visto lo que ha hecho 'Asa'el, como ha enseñado toda injusticia sobre la tierra y revelado los secretos eternos que se cumplen en los cielos;

7 y lo que ha enseñado a los humanos Shemihaza, al que tú habías dado la facultad de gobernar sobre sus compañeros.

8 "Ellos han ido hacia las hijas de los hombres y se han acostado con ellas y se han profanado a sí mismos descubriéndoles todo pecado.

9 "Luego, estas mujeres han parido en el mundo gigantes, por lo que la tierra se ha llenado de sangre e injusticia.
(Gn 6:4,5,11)

10 "Y ahora mira que las almas de los que han muerto gritan y se lamentan hasta las puertas del cielo y su gemido ha subido y no puede cesar debido a la injusticia que se comete en la tierra.
(Ap 6:10)

11 "Pero tú que conoces todas las cosas antes de que sucedan, tú que sabes aquello, tú los toleras y no nos dices qué debemos hacerles al observar eso".
(Ha 1:2-4)


Capítulo 10

1 Entonces el Altísimo, Grande y Santo habló y envió a Sariel al hijo de Lamec.

2 Y le dijo: "Ve hacia Noé y dile en mi nombre, 'escóndete'; y revélale la consumación que viene, pues la tierra entera va a perecer, un diluvio está por venir sobre toda la tierra y todo lo que se encuentre sobre ella perecerá.

3 "En seguida enseña al Justo, al hijo de Lamec, lo que debe hacer para preservar su alma para la vida y escapar definitivamente, pues por él será sembrada una planta y serán establecidas todas las generaciones".

4 Y además, el Señor le dijo a Rafael: "Encadena a 'Asa'el de pies y manos, arrójalo en las tinieblas, abre el desierto que está en Dudael y arrójalo en él;

5 bota sobre él piedras ásperas y cortantes, cúbrelo de tinieblas, déjalo allí eternamente sin que pueda ver la luz,

6 y en el gran día del Juicio que sea arrojado al fuego.

7 "Después, sana la tierra que los Vigilantes han corrompido y anuncia su curación, a fin de que se sanen de la plaga y que todos los hijos de los hombres no se pierdan debido al misterio que los Vigilantes descubrieron y han enseñado a sus hijos.
(Jl 2:22)

8 "Toda la tierra ha sido corrompida por medio de las obras que fueron enseñadas por 'Asa'el, impútale entonces todo pecado".

9 Y el Señor dijo a Gabriel: "Procede contra los bastardos y réprobos hijos de la fornicación y haz desaparecer a los hijos de los Vigilantes de entre los humanos y hazlos entrar en una guerra de destrucción, pues no habrá para ellos muchos días.

10 "Ninguna petición en su favor será concedida, pues esperan vivir una vida eterna o que cada uno viva quinientos años.

11 Y a Miguel le dijo el Señor: ve y anuncia a Shemihaza y a todos sus cómplices que se unieron con mujeres y se contaminaron con ellas en su impureza,

12 ¡que sus hijos perecerán y ellos verán la destrucción de sus queridos! Encadénalos durante setenta generaciones en los valles de la tierra hasta el gran día de su juicio.
(2P 2:4; Judas 6)

13 "En esos días se les llevará al abismo de fuego, a los tormentos y al encierro en la prisión eterna.
(Ap 20:10)

14 "Todo el que sea condenado, estará perdido de ahí en adelante y será encadenado con ellos hasta la destrucción de su generación. Y en la época del juicio que yo juzgaré, perecerán por todas las generaciones.

15 "Destruye todos los espíritus de los bastardos y de los hijos de los Vigilantes porque han hecho obrar mal a los humanos.

16 "Destruye la opresión de la faz de la tierra, haz perecer toda obra de impiedad y haz que aparezca la planta de justicia; ella será una bendición y las obras de los justos serán plantadas en alegría para siempre.

17 "En ese tiempo todos los justos escaparán y vivirán hasta que engendren millares. Todos los días de vuestra juventud y vuestra vejez se completarán en paz. (Fin de la cita)

Cuando el dios bíblico decide acabar con la humanidad por su pecado, su iniquidad, etc, no especifica por cual pecado y/o por cual tipo de iniquidad. El Pecado (del Latin Pecatum), según nuestra lengua significa una trasgresión voluntaria de preceptos religiosos. También se le dice pecado a lo que se aparta de lo recto y justo, o que falta a lo que es debido. La Iniquidad (del Latin Iniquitas), significa maldad, injusticia grande.

Aún desglosando estos conceptos la cuestión continúa siendo muy genérica, no hay una causa o pecado específico, por la cual dios en ese momento decide acabar con la humanidad, salvando solamente a Noé, sus tres hijos y las mujeres de todos ellos, incluyendo a la del propio Noé. La razón que alude dios para salvarlos solamente a ellos es que Noé fue varón Justo y Perfecto en sus días y siguió a dios.

Justo (del Latin Iustus) significa el que obra según justicia y razón; igualmente el que vive según la ley de Dios. Perfecto (del Latin Perfectus), es un adjetivo que se le da a quien tiene el mayor grado de bondad o excelencia en su línea; o también al que posee el grado máximo de una cualidad o defecto. Si nos atenemos estrictamente al significado de estas cualidades que dios alude para salvar a Noé, deja ver, que ningún otro ser humano de la época, cumplía con esas cualidades y por eso los destruye y los acaba como humanidad. Si esas fueron las razones para destruirlos, dado el estado de descomposición de nuestra sociedad, Dios debe habernos aniquilado desde hace tiempo. Cuestión que no es lógica bajo ningún punto de vista.

Por ello hay que ver este asunto desde otra perspectiva ¿Qué fue lo que verdaderamente molestó a Jehovah?. Claramente interpreto de lo escrito que el pecado fue la desobediencia de unirse carnalmente con las mujeres hijas de los hombres, que produjeron, a través de la degeneración de las razas, un hibrido de gigantes que perdió las perspectivas; que enseñaron secretos de los dioses a los humanos y también vicios que trastornaron la forma de vida que ellos le habían enseñado a la humanidad. El enojo de Jehovah tiene su razón de ser porque él estaba plenamente consciente de lo pernicioso que es la mezcla de razas de una manera directa, sin previas consideraciones ni pruebas que garanticen que el producto del mestizaje será mejor.

La naturaleza es implacable con esos errores y tiende a corregirlos, por lo general eliminando el mestizaje cuando este ha desmejorado, e inclusive eliminando también las dos razas que se cruzan. Para apreciar mejor lo que refiero, los invito a observar y/o recordar lo que pasa cuando mezclamos dos razas de perros, como por ejemplo una galgo con una raza de esa que llamamos coloquialmente callejera o criolla, el producto de este cruce por supuesto que no tendrá la rapidez del galgo original o puro, ni sus instintos, y si ese hibrido comienza a mezclarse con otras razas, muy probablemente al final obtendremos un Frankinstein.

Por lo general, de los cruces entre razas, los primeros productos son los que más sufren y así a medida que se reproducen en las subsiguientes generaciones, van perdiendo progresivamente las cualidades de la raza superior hasta que estas terminen de mutar de manera impredecible, en lo físico y en lo intelectual.

Claramente los dioses bíblicos consideraban a los terrícolas una raza inferior, nos crearon con limitaciones que les permitieran manipularnos a su antojo. Ya mencioné lo que pasó cuando la primera creación, Adán y Eva comieron del árbol del conocimiento, vimos como se enfureció Jehovah. Esto de las Razas es un tema que a la sociedad nuestra no le gusta abordar y cuando lo aborda lo hace con mucha hipocresía, pero definitivamente, no somos iguales y nunca lo hemos sido. Por el momento estamos hablando de la raza Hebrea o raza creada por Jehovah, y es menester que para dar un poco de luz a este intrincado tema, abordemos lo de las razas en cualquier escrito más adelante.

La raza de Jehovah, se reprodujo nuevamente a partir de la simiente de Noé, quien posiblemente, casi ciertamente, era el más puro de esa raza. Pero parece ser que en el devenir del tiempo dios perdió el control sobre su raza, pueblo de Israel como él lo llamaba, y se mezclaron nuevamente, de allí que terminó por escoger a los Hijos de Jacob como la nueva simiente para conservar la pureza que pretendía tuviese su pueblo. De los hijos de Jacob (Israel), las llamadas tribus de Israel, el escogió a su vez a los hijos de Leví (los Levitas) y a su descendencia para que fuesen sus sacerdotes, quienes eran los únicos que se podían acercar para que fuesen su servicio personal y como esta tribu no producía nada para sí mismos, Jehovah ordenó al resto de las tribus que debían, literalmente hablando, mantenerlos.

A mi juicio, siempre Jehovah fue monitoreando su creación y fue separando del rebaño la sangre más pura, como reza el dicho bíblico, separando la cizaña del trigo. Cuando rememoro estos episodios y medito sobre ellos, siempre me pregunté y me sigo preguntando ¿Todavía Jehovah sigue interviniendo en la conservación de la pureza de su raza? ¿Quiénes son los Levitas actuales?.¿El propósito de las guerras en el medio oriente es el de una limpieza étnica como sucedió en la época del éxodo y los episodios subsiguientes?

Evidentemente que el tema es escabroso, no fácil de digerir para quienes por su educación de hogar y convencionalismos sociales, se apegan a los dogmas religiosos; Sin embargo, recuerdo a mis apreciados lectores y a quienes aún leen la Biblia como un libro sagrado que no debe interpretarse, que uno de los principios cristianos, reza que ¨la verdad os hará libre¨. Para mí la verdad es lo que existe, lo que se siente, lo que se ve, lo que no se ve pero se siente. Lo escrito en la Biblia escrito está y lo que dice, dice, no tenemos porque interpretarlo de otra manera ni de acuerdo con lo decidido por las cúpulas de algunas organizaciones religiosas. La Biblia es un libro rico en nuestra historia antigua y debemos aprovecharla para descubrir nuestros orígenes, nuestra razón de ser, no concibo vivir por vivir, como un autómata. La creación es grandiosa y la única manera de disfrutarla es fundiéndonos con ella a través del conocimiento.

Todavía nos queda mucha tela que cortar, afortunadamente no tengo prisa y por el contrario todo ese material por cubrir me permitirá por mucho tiempo estar en contacto con Ustedes, mis amigos invisibles, parafraseando a un ilustre y respetado coterráneo nuestro, Arturo Uslar Pietri.

En la próxima entrega tal vez continuemos indagando y elucubrando acerca de las razas. Por lo pronto, hasta la próxima vez.